Una casa se hace una sola vez.
Empezar mal no es una opción válida para nadie, menos si el dinero es acotado. Sin embargo existen ciertas prácticas harto difundidas en el quehacer familiar, que ya son clásicas de la construcción.
Por lo general, para quienes tienen la fortuna de empezar a encarar o pensar una construcción, sea ampliación, remodelación o construcción desde cero, existen ciertas decisiones que ante el desconocimiento, la desconfianza o el temor de sumar costos adicionales, caen en las mismas prácticas habituales que a la larga o a la corta impactan irremediablemente en el resultado, el bolsillo y en el ánimo del propietario y de quien ejecuta:
Cuando hacer las cosas al revés, tristemente se convierte en moneda corriente:
- Construir una obra clandestina: la ilegalidad es habitual, después aparecen los problemas: intimaciones, multas o denuncia por parte de un vecino, etc. Una obra clandestina se convierte en una casa con irregularidades. Con el tiempo, a la larga o a la corta se convierte en un problema de costosa solución.
- Decidir a través de la búsqueda en internet: muchos “googlean” materiales, alternativas de construcción económicas o de ejecución rápida. Evitar la consulta y resolver temas tan importantes como la concreción de la casa “viendo” opciones través de una pantalla de una PC es un camino incompleto.
- Improvisar es sumar sobrecostos: quizás sea el ítem más grave. La falta de documentación técnica mínima detallada atenta contra la obra, el “vamos viendo” minimiza resultado y aumenta el malestar de sus propietarios.
- Negar o delegar cuestiones técnicas al albañil: pensar que la experiencia del albañil va a solucionar los grises o las indecisiones técnicas es hipotecar patologías o resultados a futuro.
- Pedir presupuestos de construcción: considerar o comparar una obra de una casa similar a la compra de un auto, un terreno o un viaje de vacaciones es el error más común. Muchos niegan o minimizan este punto. Si desea abordar un costo a medida, razonable y conveniente lo mejor es hablarlo en la consulta con el profesional.
- No tener idea que implica un proyecto y para qué sirve: una confusión clásica es no saber que implica un proyecto y cuál es su misión. El proyecto es el paso posterior al anteproyecto e implica la documentación clave para cotizar y construir sin sorpresas ni sobresaltos. Actualmente se construyen 9 de cada diez casas sin documentación de ningún tipo. Paso clave para cuidar costos.
- Falla o nulo control y seguimiento de la obra: sumado al punto anterior la falta de control del proceso, sumado a la improvisación del constructor para decidir y solucionar en plena marcha de una obra y su personal esto atenta a los tiempos, el resultado y los costos. Existe más de un 50% clave de la obra que nadie controlo y que se “oculta” bajo cimientos, muros y techos.
- Materiales de pésima calidad: el miedo a los costos altos, el poco dinero, sumado a la nula consulta, aborda las clásicas soluciones harto-difundidas de ineficiente y desactualizada forma de ejecución constructiva.
- Mano de obra ineficiente e irresponsable: la falta de decisión técnica y de definición constructiva da rienda suelta a confusiones del tipo “oral” del “no me entendiste”; ”vos esto lo deberías saber” o el “hablamos que” o “te dijimos tal otro”; todas situaciones tensas de un lado y del otro. Saltar pasos y evitar hacer un proyecto documentado al milímetro hace estas cosas.
- No consultar primero con un arquitecto: ante una dolencia se consulta al médico, al empezar un negocio nos asesoramos con un contador o si entramos en un litigio laboral salimos corriendo a buscar un abogado. Sin embargo los que consultan a un arquitecto para abordar una obra, ampliar inquietudes, consultar costos, tipos de materiales o averiguar cuestiones técnicas o municipales son muy pocos.
Hola Carlos:
Soy arquitecta recibida en Uruguay trabajo haciendo pequeñas reformas. Ahora tengo un proyecto de reforma en CABA que por sus caracteristicas y dimensiones requiere tramites municipales. Vos trabajas encargandote de esta parte de un proyecto? Agradezco tu respuesta.
Hola Andris. Escribime un mail que te respondo. Es cparedes@paredestudio.com.ar saludos. Carlos!